domingo, 10 de febrero de 2013
COMO SE TRANSMITE LA GRIPE
La gripe
se transmite desde individuos infectados a través de gotas en aerosol cargadas de virus (procedentes de secreción nasal, bronquial o saliva que contenga alguna de ellas ), que son emitidas con la tos o los
estornudos o sólo al hablar. Ya mucho más raramente, a través de las heces de
pájaros infectados. También es transmisible por la sangre y
por las superficies u objetos contaminados con el virus, que se denominan fomites.
Los virus de la gripe resisten más en ambiente seco y frío. Pueden
conservar su capacidad infectiva durante una semana a la temperatura del cuerpo
humano, durante 30 días a 0 °C y durante mucho más tiempo a menores temperaturas.Puede ser fácilmente inactivado
mediante detergentes o desinfectantes.
La gripe se distribuye en epidemias estacionales
que provocan cientos de miles de defunciones, que pasan a ser millones en los
años de pandemia (epidemia
global). Durante el siglo XX se
produjeron cinco pandemias de gripe debido a la aparición pormutación de diferentes cepas del virus. A
menudo estas nuevas cepas han surgido a partir del trasvase de cepas típicas de
animales al ser humano, en lo que
se denomina salto de especie o heterocontagio. Una variante mortal del virus de
la gripe aviar denominada H5N1 pasó
por ser la principal candidata para la siguiente pandemia de gripe en humanos
desde que traspasó la barrera de especie en los años 1990 y provocó decenas de defunciones en
Asia, hasta la aparición de la neogripe A (H1N1) en 2009. Afortunadamente
aquella variante aviar no mutó y no puede transmitirse de persona a persona,
pues sólo afectó a humanos desde aves contagiadas.
Ese contagio no es fácil
pues requiere unas condiciones muy especiales.
RESFRIADOS Y GRIPE
RESFRIADOS
Y GRIPE
¿Qué
son el resfriado común y la gripe?
El
resfriado común y la gripe son infecciones virales del tracto respiratorio, el
cual incluye la garganta, la nariz, las vías respiratorias y los pulmones.
¿Cómo
puedo determinar si tengo resfriado o gripe?
A
pesar de que el resfriado común y la gripe tienen muchos síntomas similares,
son 2 afecciones distintas.
Los
síntomas de un resfriado se desarrollan en forma lenta y pueden incluir:
Fiebre
de hasta 102 °F. (38.9 °C)
Goteo
o congestión nasal (a menudo con secreciones de color verde o amarillo).
Dolor
de garganta.
Tos.
Estornudos.
Fatiga.
Dolores
musculares.
Dolor
de cabeza.
Lagrimeo
en los ojos.
Los
síntomas del resfriado generalmente son más leves que los síntomas de la gripe.
Por
lo general, los síntomas de la gripe aparecen en forma repentina y pueden
incluir:
Fiebre
superior a 102 °F. (38.9 °C)
Congestión
nasal.
Náuseas.
Escalofríos
y sudoración.
Fatiga.
Dolores
musculares, en especial, en la espalda, los brazos y las piernas.
Tos.
Dolor
de cabeza.
Pérdida
del apetito.
¿Qué
es la gripe H1N1?
La
gripe H1N1 (que también se llama gripe porcina) es una infección respiratoria
provocada por un virus que se encuentra en cerdos. La gripe H1N1 puede infectar
a los seres humanos. Para obtener más información, vea gripe H1N1.
¿Debo
llamar a mi médico?
En
la mayoría de los casos, usted no necesita consultar a su médico cuando tiene
resfriados o gripe. Sin embargo, si usted tiene alguno de los síntomas que se
indican en el recuadro a continuación, llame a su médico.
En
los niños:
Fiebre
alta (superior a 103 °F) o fiebre que dure más de 3 días.
Síntomas
que duran más de 10 días.
Problemas
para respirar, respiración acelerada o respiración sibilante.
Color
de piel azulado.
Dolor
de oído o drenaje del oído.
Cambios
en el estado mental (como no despertarse, irritabilidad o convulsiones).
Síntomas
parecidos a los de la gripe que mejoran, pero regresan con fiebre y una tos
peor.
Empeoramiento
de una afección médica crónica (como la diabetes o una enfermedad
cardíaca).
Vómitos
o dolor abdominal.
En
los adultos:
Fiebre
alta y prolongada (superior a 102 °F) con fatiga y dolores por todo el
cuerpo.
Síntomas
que duran más de 10 días o que empeoran, en lugar de mejorar.
Problemas
para respirar o falta de aire.
Dolor
o presión en el pecho.
Desmayos
o sensación de que está a punto de desmayarse.
Confusión
o desorientación.
Vómitos
intensos o persistentes.
Dolor
intenso de los senos paranasales en la cara o en la frente.
Glándulas
muy hinchadas en el cuello o la mandíbula.
¿Cuál
es la causa de los resfriados y de la gripe?
Los
virus provocan resfriados y gripe. Hay más de 200 virus distintos que pueden
provocar resfriados. No hay tantos virus que provoquen gripe. Por este motivo,
hay una inyección disponible para la gripe y no para los resfriados.
¿Qué
puedo hacer para sentirme mejor?
No
existe una cura para el resfriado común. Todo lo que puede hacer para sentirse
mejor es tratar los síntomas mientras el cuerpo combate el virus.
Maneras
de tratar los síntomas del resfriado y de la gripe
Descanse
mucho, en especial, mientras tenga fiebre. Descansar ayuda al cuerpo a combatir
las infecciones.
Deje
el hábito de fumar y evite el humo de segunda mano, que pueden empeorar los
síntomas del resfriado.
Beba
mucho líquido, como agua y sopas claras. Los líquidos ayudan a aflojar la
mucosidad. Los líquidos también son importantes debido a que ayudan a prevenir
la deshidratación.
Haga
gárgaras con agua salada tibia algunas veces al día para aliviar el dolor de
garganta. Los aerosoles o las pastillas para la garganta también podrían ayudar
a aliviar el dolor.
Evite
consumir alcohol.
Utilice
gotas nasales de solución salina (agua salada), a fin de ayudar a aflojar la
mucosidad y humedecer la piel de la nariz que esté sensible al tacto.
Para
la gripe, es probable que su médico le recomiende tratar los síntomas hasta que
usted se sienta mejor. En casos graves, su médico podría recetarle un
medicamento antiviral. Los medicamentos antivirales pueden acortar el tiempo
durante el cual esté enfermo con gripe. Estos medicamentos se encuentran
disponibles en forma de píldoras o jarabe o en un inhalador. El tipo de
medicamentos que es para inhalación podría provocar problemas en algunas
personas que tienen asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
¿Qué
medicamentos puedo darle a mi hijo?
No
existe una cura para el resfriado ni para la gripe, y los antibióticos no
funcionan contra los virus que provocan los resfriados y la gripe.
Los
analgésicos como el acetaminofén (una marca: Children's Tylenol) pueden ayudar
a aliviar los dolores de cabeza, los dolores musculares y los dolores de
garganta, así como también tratar la fiebre. Asegúrese de que le está dando la
dosis correcta a su hijo, de acuerdo con su edad y peso.
Los
aerosoles nasales y los descongestivos no son recomendables para niños
pequeños, debido a que podrían provocar efectos secundarios. Los medicamentos
para la tos y los resfriados no son recomendables para los niños, en especial,
para aquellos menores de 2 años. También existe poca evidencia de que los
medicamentos para la tos y los resfriados, y los descongestivos nasales sean
eficaces para tratar a los niños.
Para
tratar los resfriados o la gripe, asegúrese de que su hijo descanse y beba
abundante cantidad de líquido. Usted puede utilizar un humidificador para
ayudar a humedecer el aire en el dormitorio de su hijo. Esto puede ayudar a
aliviar la congestión nasal. Usted también puede utilizar un aerosol nasal de
solución salina para diluir la mucosidad nasal y una pera de succión para
succionar la mucosidad y sacarla de la nariz de su bebé o hijo.
¿Qué
medicamentos de venta libre puedo tomar para los resfriados o la gripe?
Los
medicamentos de venta libre no pueden curar los resfriados ni la gripe. Sin
embargo, los medicamentos pueden ayudar a aliviar algunos de los síntomas de
los resfriados o de la gripe. Consulte a su médico antes de darle algún
medicamento a un niño.
Muchos
de los productos para los resfriados y para la gripe se encuentran disponibles
sin receta médica.
¿Cómo
están compuestos los medicamentos de venta libre para los resfriados y para la
gripe?
Los
ingredientes mencionados a continuación se encuentran en muchos medicamentos
para los resfriados y para la gripe. Lea las etiquetas con cuidado. Si tiene
preguntas, hable con su médico o farmacéutico.
Los
analgésicos alivian las molestias y los dolores, y reducen la fiebre. Entre los
ejemplos se incluyen el acetaminofén, la aspirina, el ibuprofeno, el
ketoprofeno y el naproxeno. Advertencia: No se debe dar aspirina a los niños ni
a los adolescentes debido a que puede provocar el síndrome de Reye.
Los
antitusivos (que también se llaman antitusígenos) le indican al cerebro que
deje de toser. No tome un antitusivo si está tosiendo con mucosidad.
Advertencia: No se deben dar medicamentos para la tos a niños menores de 4
años.
Los
expectorantes ayudan a diluir la mucosidad para que pueda expulsarse con más
facilidad al toser.
Los
aerosoles nasales descongestivos encogen las fosas nasales y reducen la
congestión. Los adultos solo deben utilizar estos medicamentos durante pocos
días. El uso excesivo puede hacer que los síntomas empeoren cuando la persona
deje de utilizar el aerosol nasal. Advertencia: Los niños no deben utilizar
estos medicamentos.
¿Puedo
evitar los resfriados o la gripe?
Usted
puede reducir el riesgo de tener resfriados o gripe lavándose las manos con
frecuencia, lo que detiene la propagación de los gérmenes. Tener una
alimentación saludable, hacer ejercicio y dormir lo suficiente también
desempeña un rol en la prevención de los resfriados y de la gripe debido a que
ayudan a estimular el sistema inmunitario.
Tosa
y estornude en la parte interna del codo (en lugar de la mano). Limpie las
superficies comunes, como la mesa y las encimeras, los juguetes de su hijo, los
picaportes de las puertas y los cuartos de baño, con un desinfectante
antibacteriano. Esto puede ayudar a detener la propagación de los gérmenes.
La
mejor manera de evitar contraer gripe es recibir la vacuna contra la gripe.
Usted debería recibir la vacuna cuando esta se encuentre disponible,
generalmente en otoño, pero usted también puede recibirla en cualquier momento
durante la temporada de gripe. La vacuna se encuentra disponible en forma de
inyección o aerosol nasal. Las vacunas funcionan exponiendo al sistema
inmunitario al virus de la gripe. El cuerpo desarrollará anticuerpos contra el
virus para protegerlo a usted, a fin de que no tenga gripe. La vacuna
inyectable contra la gripe contiene virus muertos. La vacuna inyectable contra
la gripe es segura para los adultos y para todos los niños de 6 meses o más, y
se recomienda enérgicamente que todos los niños de 6 a 59 meses reciban la
vacuna inyectable anual contra la gripe. La vacuna en aerosol nasal contiene
virus vivos pero debilitados. Es segura para los adultos y para todos los niños
de 2 años o más que no tengan asma ni problemas respiratorios. Usted no puede
contraer gripe a partir de la vacuna inyectable contra la gripe ni a partir de
la vacuna en aerosol nasal.
Algunas
personas que reciban la vacuna tendrán gripe de todos modos pero, por lo
general, tendrán un caso más leve que las personas que no están vacunadas. La
vacuna se recomienda, en especial, a las personas que tienen más probabilidades
de enfermarse en forma grave por complicaciones relacionadas con la gripe.
sábado, 9 de febrero de 2013
LA GRIPA
¿Qué es?
La gripe es una enfermedad del
aparato respiratorio producida por el virus de la influenza. Si algo
caracteriza a este microorganismo es su capacidad de contagio. El virus pasa
con mucha facilidad de una persona a otra a través de las gotitas de saliva que
se expulsan al hablar, toser o estornudar. El contacto con manos u objetos
contaminados también supone una vía de infección.
Todos los años se producen
epidemias de enfermedades respiratorias causadas por la gripe durante el final
del otoño o el comienzo del invierno. A pesar de que muchos virus respiratorios
pueden causar síntomas de gripe, los virus A y B de la gripe suelen ser responsables
de las epidemias hacia el final del otoño o el invierno. En el hemisferio
norte, la gripe aparece todos los años entre los meses de noviembre y abril,
siendo más agresivo de diciembre a marzo. En cambio, en el sur, el virus
aparece en el periodo de mayo a octubre.
Síntomas de Gripe
Al comienzo la gripe cursa con
dolores de cabeza, escalofríos y tos seca, síntomas a los que le sigue la fiebre (aparece
en el segundo o tercer día) que puede subir hasta 38,5 o 39,5 ºC, dolor
muscular en brazos, piernas y espalda, y un estado de malestar general y
cansancio. Con la fiebre los síntomas respiratorios se hacen visibles:
congestión nasal, enrojecimiento y malestar en la garganta.
Al principio, los síntomas
respiratorios pueden ser relativamente leves; posteriormente, la tos puede
intensificarse y agregarse esputos. En muchos casos la piel adquiere una
temperatura elevada y está enrojecida, especialmente la cara. El enfermo,
especialmente si es un niño, puede presentar náuseas y vómitos. Los síntomas
suelen permanecer durante una semana, luego desaparecen, aunque permanece la
sensación de cansancio e inapetencia unos días más. Muy pocas veces la gripe va
acompañada de síntomas gastrointestinales.
Al cabo de 2 o 3 días, la
mayor parte de la sintomatología desaparece rápidamente, si bien en ciertos
casos la fiebre dura hasta 5 días. Sin embargo, la bronquitis y la tos pueden persistir durante 10 días o más y los cambios
producidos en las vías respiratorias tardan de 6 a 8 semanas en resolverse
completamente. La debilidad y la fatiga pueden prolongarse durante varios días
o en ocasiones durante semanas.
Prevención
Un individuo expuesto al virus
de la gripe produce anticuerpos contra él, que le protegen contra una nueva
infección por ese virus en particular. Son pocas las medidas de prevención
eficaces frente al virus de la gripe. Sin embargo, existen algunos medios para
alejarlo en cierta medida: seguir una dieta equilibrada que incluya cereales
integrales, verduras, marisco y sustancias como el ajo, consumir hierbas como
la equinácea, el saúco, astrágalo y milenrama, aumentar la ingesta de vitamina
C y extremar las medidas de higiene para evitar contagios. Sin embargo, la
vacuna es la medida de prevención más eficaz en aquellas personas con mayor
riesgo de padecer la enfermedad o de sufrir complicaciones.
La vacuna no ofrece una
protección total, su índice se sitúa alrededor del 80 por ciento de individuos
vacunados. El periodo idóneo de vacunación es entre septiembre y octubre,
puesto que el efecto protector aparece a las dos semanas de administrarla. A
partir de los 13 años de edad, la vacuna se administra con una inyección
intramuscular. Está contraindicada en alérgicos al huevo (anafilaxia), en personas con fiebre de más de 38ºC y en
embarazadas. Un cinco por ciento de los vacunados sufren reacción a la misma.
La más común es fiebre y malestar general, además de alteraciones
alérgicas en la zona donde se ha
administrado la inyección. Generalmente, desaparecen a los dos días.
La amantadina o la
rimantadina, dos fármacos antivíricos, pueden proteger contra el virus A, pero
no así contra el B. Se utilizan durante las epidemias de gripe por virus A para
proteger a las personas que se encuentran en estrecho contacto con los infectados
y otras con riesgo elevado de infectarse y que nunca han sido vacunadas. Es
posible dejar de administrar el fármaco 2 a 3 semanas después de la vacunación.
Si no es posible aplicar la vacuna, se toma amantadina o rimantadina durante
toda la epidemia, generalmente durante 6 a 8 semanas. Estos fármacos pueden
causar nerviosismo, falta de sueño y otros efectos colaterales, especialmente
en los ancianos y los afectados por alguna enfermedad cerebral o renal. La
rimantadina tiende a causar menos efectos colaterales que la amantadina.
Diagnósticos
Por lo general todos conocen
los síntomas de la gripe, y dado que se produce por epidemias, su diagnóstico
suele ser correcto por la propia persona o por su entorno cercano. Lo que le
diferencia de un catarro común es su gravedad y la presencia de fiebre muy
alta. Para identificar la infección por el virus de la gripe se puede realizar
una prueba a partir de una muestra de sangre, aunque no siempre es necesario
llevar a cabo este procedimiento. El mejor modo de establecer el diagnóstico es
recuperando el virus mediante un cultivo de secreciones respiratorias.
Tratamientos
El mejor tratamiento es
"pasar la gripe", lo que significa que hoy por hoy no tiene curación.
Aún así, existe algunos fármacos antivirales (no antibióticos) y remedios de
origen natural que pueden reducir la intensidad de los episodios. Las
recomendaciones médicas resultan muy familiares: permanecer en cama y reposar,
beber mucho líquido (zumos y caldos) y recurrir a los antitérmicos, analgésicos
y antipiréticos para rebajar los síntomas, fundamentalmente desde el momento en
que comienzan los síntomas hasta 24 ó 49 horas después de que la temperatura
corporal vuelva a la normalidad. Los antibióticos no sirven para tratar un
cuadro gripal. La acción de estos fármacos sólo se dirige hacia las bacterias,
y la gripe está producida por un agente viral. Sólo en caso de que evolucione
hacia complicaciones como neumonía o bronquitis tiene sentido valerse del tratamiento antibiótico. Pero además de los
fármacos antivirales, el paciente tiene la posibilidad de recurrir a terapias
naturales para reducir la agresividad de los síntomas.
Dentro del amplio espectro de
plantas medicinales (lo que constituye la base de la llamada fitoterapia) se
encuentra la equinácea, una planta que ha probado su eficacia frente a la gripe
y los procesos catarrales en diversos estudios científicos. Los médicos
recomiendan adquirir los preparados de equinácea en farmacias y no prolongar el
tratamiento más de seis semanas. En algunos casos se han descrito alteraciones
del hígado, como principales efectos adversos, aunque de forma esporádica.
Otros datos
La transmisión del virus de la influenza se produce a través de las
mucosas que se encuentran en los ojos, nariz y boca. Una vez que penetra en el
organismo, el virus permanece latente unos dos o cuatro días, tras los cuales
aparecen los síntomas de la enfermedad. Las personas enfermas pueden transmitir
el virus durante los primeros días de la gripe.
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